El pelo se expone a gran cantidad de agentes externos todos los días como el clima o el viento y otros internos como una alimentación o nutrición deficiente, esto puede dar como resultado un pelo dañado presentándose de muchas formas, desde puntas abiertas hasta enredos y pérdida de volumen, que pueden variar en gravedad y causa.
A continuación, te contamos los síntomas más comunes del cabello dañado y cómo solucionarlo:
Síntomas comunes
Puntas abiertas:
Las puntas abiertas son una de las señales más evidentes de que tu cabello necesita atención. Estas puntas se fracturan y se separan, lo que causa que el cabello pierda su apariencia saludable y brillante.
Sequedad:
Esto no solo puede llevar a la picazón y descamación del cuero cabelludo, sino que también hace que el cabello se enrede y se rompa con facilidad. Como resultado, la textura del cabello puede volverse áspera y el volumen puede disminuir, dificultando el peinado.
Falta de brillo:
Cuando el cabello está dañado, pierde su brillo característico, lo que lo hace ver apagado y sin vitalidad.
Disminución de elasticidad:
Un cabello debilitado presenta una notable pérdida de elasticidad, lo que significa que no puede estirarse adecuadamente sin quebrarse. Esto aumenta la posibilidad de rotura y afecta negativamente a la densidad del cabello.
Solución ante estos síntomas
El cabello dañado puede resultar de diversos factores.
- El uso excesivo de calor, como secadores y planchas, lo vuelve quebradizo, así que es recomendable limitar su uso y aplicar protectores térmicos.
- La exposición al sol reseca el cabello, por lo que es útil usar sombreros o productos con filtros solares.
- Los tratamientos químicos, como tintes, debilitan el cabello, así que es crucial usar tratamientos hidratantes después.
- Además, una dieta pobre en vitaminas y proteínas afecta su salud, así que incluye alimentos ricos en nutrientes.
Tratamientos para revitalizar tu cabello
Champú hidratante: comienza tu rutina con el Champú Sólido Seco o el Champú Sólido Reparador de Pardo 1927.
El champú sólido seco:
- Aporta la hidratación necesaria facilitando la retención de humedad, reparando las áreas más dañadas.
El champú sólido reparador:
- Perfecto para cabellos castigados por tintes, planchas y secadores. Regenera tu cabello desde la raíz a las puntas, devolviéndole el brillo, suavidad y vitalidad.
Acondicionador nutritivo: después del champú, un acondicionador para suavizar el cabello y protegerlo de los nudos.
Mascarilla reparadora: una vez a la semana, aplica la específica para el cabello dañado.
- Este tratamiento mejora la regeneración capilar y crea una barrera protectora contra futuras roturas, ideal para restaurar la salud de tu cabello.
Aceites reparadores: los aceites son perfectos para tratar el cabello fuera de la ducha.
- Te ayudará a nutrir el cabello, controlar el encrespamiento y algunos ofrecen protección térmica, dejando tu melena suave y saludable.
Algunos tips para reducir el daño
Utiliza champús suaves que no dañen el cabello
Reduce la aplicación de calor: intenta secar el pelo con la temperatura más fría posible.
Evita cepillar el pelo cuando está húmedo ya que es más frágil que cuando está seco, cepíllate el pelo antes de lavarlo y después de haberlo secado bien para que no se rompa. Si tienes el pelo liso desenreda tu cabello cuando esté seco, sin embargo, si tienes el pelo rizado es mejor cepillarlo cuando está húmedo.
Hidrátalo y protégelo con frecuencia, aunque parezca que tu pelo está sano, mantenlo hidratado y protegido y verás cómo aumenta su brillo.
Siguiendo esta rutina y utilizando productos adecuados, podrás recuperar la vitalidad de tu cabello y disfrutar de un aspecto saludable.
¡Cuida tu melena y presume de un cabello radiante!